Es 18 de septiembre. Amanece un día en Los Llanos Vital lleno de ilusión. Los mayores de la Residencia y Centro de Día saben que hoy toca vivir un día muy especial. Es el día de la Milla Intergeneracional.
Llevan días esperando que llegue este momento y preparándose para la ocasión. Tanto físicamente (haciendo un poquito de deporte cada día, dando sus paseos y caminatas por el jardín y por los caminos cercanos) como dándole vida a los materiales que hacen falta para la ocasión: trofeos y carteles, entre otros, forman parte de las actividades de los talleres en los días previos a La Milla.
Y por fin llega el gran día. Los mayores se despiertan y se ponen su equipamiento deportivo para la ocasión, sudaderas y zapatillas de deporte forman parte de su vestuario de hoy. Desayunan animándose unos a otros a participar en la Milla. Se ponen sus dorsales y se sientan en el palco que tienen reservado hasta que llegue su turno. Desde su posición privilegiada ven como se suceden ante sus ojos todas las carreras individuales. Aplauden y animan a todos y cada uno de los corredores porque la Milla Intergeneracional es una fiesta del deporte y de la solidaridad.
Emociones a flor de piel en la IV Milla Intergeneracional
La Milla Intergeneracional Siempre Vital deja de nuevo un gran abanico de emociones. Desde la emoción de ver a los más pequeños dándolo todo en la pista, los seniors y sabios dando el máximo de sí mismos, a la ilusión de los más mayores acompañados por sus familias y voluntarios. Bastones, andadores o sillas de ruedas han sido los medios que les han ayudado a llegar a la meta de la mano de sus parejas más jóvenes. Todos y cada uno de ellos nos han dado, de nuevo, una lección de superación y solidaridad.
Pero además, esta IV Milla Intergeneracional ha sido más solidaria aún si cabe. Con la mitad de lo recaudado con las inscripciones, el Dorsal 0, la venta de pulseras y de artículos que han hecho nuestros mayores en el taller de costura, hemos recaudado la cantidad de 800 euros para aportar a la investigación del Alzheimer, entregados a la Fundación Reina Sofía.
Superando retos
Esta IV Milla Intergeneracional Siempre Vital nos ha dejado unas cifras de participación superiores a las de otros años: más de 130 mayores por encima de los 65 años recorriendo La Milla y los 500 dorsales disponibles, agotados. Ahora, con las emociones todavía a flor de piel por lo vivido, empezamos a trabajar y establecer objetivos para la V edición de nuestra Milla. Seguir creciendo en número de corredores, de patrocinadores y colaboradores para superarnos y seguir demostrándole a la sociedad que nuestros mayores son activos, nuestros jóvenes solidarios y todos juntos, están llenos vida.